Luis Eduardo Ramirez Sanchez
Quise personalizar mi bitácora ya que de esa manera me puedo
apropiar más de ella. La idea la tome del artista cubano, Cesar Santos, cuyo
trabajo admiro. Cesar se dedica a pintar retratos en un estilo semejante a eso
de los antiguos maestros de la pintura utilizando la paleta de Zorn; Rojo Cadmio, Amarillo Ocre, Negro Marfil, y Blanco Titanio.
Dibujo de bebe, inspirado por mi hijo Liam Gabriel.
Máscaras; somos
incluso hasta lo que no mostramos. Partes de nosotros que ocultamos no dejan de
conformar quienes somos. ¿Alguien puede
llegar a conocer todo lo que somos atreves del cambio constante que atravesamos?
Ejercicios del manejo del bolígrafo. Noto como el cambio de presión
afecta la opacidad y grosero del trazo. Intento haciéndolo en capas, empezando
ligeramente y luego con más presión. También haciendo capas ligeras. Me incomoda
no poder borrar los errores.
Estudio de músculos del brazo.
Me parece espectacular el efecto del trazo que da la
plumilla. Me recuerda a un estilo de "comic". Hecho con plumilla y micro punta.
Las proporciones no son las ideales, lo hacen ver, en mi opinión, autentico. Me
gustó el resulta final.
Eduardo Ramirez; mi padre. Hombre que admiro y a quien le
agradezco mucho por todo lo que me ha enseñado y dado. Por más diferencias que
tengamos, opiniones que no compartamos siempre esta dispuesto para ayudarme. Al
nacer mi hijo logre entender más a mi padre, el amor hacia un hijo es indescriptible.
La distancia entre padre e hijo es dolorosa.
Inspirado en el fallecimiento de mi bisabuela en el mes de
marzo del presente año. Afortunadamente alcanzó a conocer su tátara-nieto, mi
hijo. El ciclo de la vida, su fin y su inicio.
Me demoré mucho en esta pintura, quise estudiar los pliegues
en telas y las transiciones de luz a sombra. Me dejo una enseñanza, creo yo,
crucial. Me había pasado con obras anteriores, pero lo entendí mas con esta.
Cada obra tiene sus etapas, en el inicio no se ve como un gran logro, pero tener
una buena base (proporciones y figuras básicas claras) atribuye a que el
resultado final sea satisfactorio.
Aprovechando el encierro de la cuarentena decidí hacer papel
reciclado. Tomando papel utilizado, los rasgué, la liqué, y lo vertí en un
recipiente grande. Hice un marco y estiré una tela porosa el cual se hunde en
el recipiente se agita el agua y se levanta. Al hacer esto el agua se filtra y las
fibras de papel se entrelazan creando la hoja. Luego lo transferí a otra tela, ubicándolas
una encima de otra. La prensé para extraer la máxima cantidad de agua, la colgué
en ganchos para dejar secar al sol, después de varias horas estuvieron listas la
hoja. Apliqué gesso, lo deje secar 24 horas y aplique pinturas de aceite sobre ellas.